Leyendo a G.E. Moore

Leyendo a G.E. Moore
Ca'n Pastilla 27 Marzo 2016

sábado, 27 de septiembre de 2014

El porqué de este blog, ahora.

Me adelanto a intentar responder a esta pregunta, que algunos de los que lean este blog (si es que alguien lo hace) se podría plantear. De hecho yo me la he hecho repetidas veces antes de ponerme a la tarea, y no estoy seguro de haberme sabido responder con claridad. ¿Por qué, ahora, a mis años, me meto en camisas de once varas?
Desde que el año pasado sufrí un infarto, mi corazón ya no me permite hacer la montaña que a mi realmente me gusta, y también me han prohibido salir sólo al monte. Así que, entre una cosa y otra, ya no hago tanta montaña y, además, la que hago, salvo excepciones, no incluye itinerarios novedosos y/o desconocidos, que merezcan la pena publicar en la prensa y/o en mi blog “Mis días de montaña”. Y eso ha hecho que disponga de más tiempo “libre” diario. Necesito llenar mis horas con algo que me apasione. Pero leer y leer durante horas, historia, biografía, ensayos, filosofía, montañismo, viajes… escribir y escribir, la mayoría de las veces únicamente para mí sólo, pueden llenar mis días con intensidad. Por eso no creo que esa sea la explicación, al menos no la única, del porque de esa nueva aventura, en la que ahora me embarco.
Más bien pienso que la razón estriba en que estoy muy preocupado, angustiado diría, por los problemas, graves, que está sufriendo España y una enorme parte de sus ciudadanos, y el PSOE (en el que llevo militando cuarenta años) y sus afiliados. Y tengo que hacer algo, aunque sea poco, pues mis capacidades físicas e intelectuales ya no son las de antaño. Pero al menos aportar mi granito de arena, para intentar que todos los problemas que nos aquejan y nos indignan, los afrontemos desde la serenidad y la racionalidad, desde el respeto a los demás, y con educación. Debatiendo con pasión, si, todas las opiniones diversas, pero teniendo presente que en democracia, todo el mundo tiene derecho a expresarse pacíficamente, respetando siempre a los demás. Es aquello que alguien dijo tan acertadamente: “No estoy nada de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida, tu derecho a decirlo”. Seguramente muchos se indignarán al leerme, pues se comprobará que mis opiniones no coinciden, en general, para nada, con las que circulan por las redes y en las tertulias. Así que quizás, para el buen ritmo de su corazón, a muchos les convenga más abstenerse de este blog.
Por principios estoy absolutamente en contra de todos los demagogos, populistas, sectarios y maximalistas. Un referéndum o un plebiscito, no me parece el instrumento más democrático, para solucionar intereses encontrados. El tema monarquía/república para mi no es urgente, porque no solucionaría ningunos de los grandes problemas que nos abruman; y porque además en lo de la forma de estado o de gobierno, yo soy más bien “accidentalista”, como lo era el PSOE en sus orígenes. No soy nacionalista, ni catalán, ni vasco, y mucho menos españolista. Etc… etc… etc. Volveré sobre cada uno de estos temas con más profundidad en las próximas entradas. Y para terminar hoy, sólo dos precisiones más:
Lo que escriba en este blog sólo me representa a mí, a nadie más, ni persona ni organización.
 Y el título de blog, lo he tomado prestado de una biografía sobre mi admirado Bertrand Russell.